Sociedad de la (des)información (dis)capacitada
Ayer, día 21 se clausuró la 5ª muestra Cine y Discapacidad en la Facultad de Comunicación de la Universidad de Sevilla. La cita me ofreció una lección de vida, una lección para usar en casa, en mi entorno, cuando alguien señale a mi hermano pequeño por raro, por diferente. David tiene doce años y síndrome de Down. Esa sería la respuesta tradicional, la lógica hasta que tuve el honor de escuchar a Albert Espinosa. El magnífico guionista de películas como 4ª Planta y Va a ser que nadie es perfecto, títulos que no son los que él pensó y que no le gustan nada, es discapacitado, anda con una bien visible cojera. Perdió una pierna a causa del cáncer que sufrió cuando era niño (y vivió, porque el cáncer no tiene por qué ser mortal). Albert señala que los discapacitados no tienen algo de menos, sino algo que las otras personas no tienen. Él no se define como alguien al que le falta una pierna, sino como una persona que tiene un muñón. David tiene doce años y un cromosoma de más. Esa es la respuesta que hay que dar. De la muestra me gustaría recomendar dos cortos, Lo obvio y lo obtuso de Nuria Polo y Di algo de Luis Deltell. Además os invito a informaros sobre las diversas discapacidades que existen, puesto que el desconocimiento es lo que más daño hace a estas personas, las dejamos atrás no por su discapacidad, sino por la incompresión de nosotros mismos. Albert Espinosa no pide respeto (cuidado con el señor cojo, dicen las madres a sus hijos), sino interés.
miércoles, 22 de noviembre de 2006
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1 comentario:
Qué razón tienes. No hay arma más peligrosa que la ignorancia voluntaria. Despues de todo son personas, que el par 21 tenga 3 cromosomas en lugar de 2 no los hacen peores, te aseguro que hay gente con 42 cromosomas que no merecen respeto ni interés.
Saluda a tu hermano y hazle saber que tiene la relativa suerte de haber nacido en una época menos dura para él...
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